No tiene derecho a fallar…

Por cierto…

Llegó por fin AMLO a la Presidencia, arrastra el repudio de la mitad de electores que acudieron a las urnas y de a tiro por viaje lo cuestionan como si sus acciones fueran nuevas y en el pasado los presidentes hubieran sido inmaculados.

Vaya, no creo cumpla al menos la mitad de las promesas y espero que me decepcione por esto.

Pareciera que México se dividió en 2: los que creen ciegamente en “Tata” AMLO y los que padecen el síndrome de Estocolmo y desean le vaya mal en la presidencia para demostrar que ellos tenían razón.

En la percepción de este opinador no creo que cumpla, pero quisiera lo haga, finalmente México es como un viejo nogal al que le urge una buena paleada para sacudirle de la corrupción que alcanza hasta el 50% de “comisiones” por el recurso que llega a los municipios…

Nos dicen que batalló cuando cumplió con la Protesta constitucional porque alguien le oyó decir: ¡he, ya joy prejidente, ya no protesto!